En esta foto tienes un marco de los baratos con el passe-partout ya montado. Cuando compres el tuyo te vendrá con una cartulina de color claro en lugar del passe-partout:

Una vez tienes el marco has de comprar el passe-partout a la medida.
Mide el marco por el interior tanto de alto como de ancho y apúntalo en un papel.
Luego mide la foto y quita unos milímetros para dejar algo de margen.
Es mejor que hagas un pequeño dibujo con las medidas internas y externas del passe-partout. Cuando lo pidas le dices a quien te atienda, yo voy a Leroy Merlín, que ya has tenido en cuenta el margen. Viene a costar unos 3 euros y te lo hacen en unos minutos.
Esta imagen es del detalle del passe-partout que, como puedes ver, tiene unos milímetros de grosor y te lo cortan con inclinación:

La importancia de escoger estos marcos es por el tipo de agarres que tiene para sujetar las fotos. Hay algunos marcos que tienen unas chapillas que se doblan por lo que con el uso se acaban rompiendo.
Parte posterior del marco con todos los enganches:

Ahora vamos a colocar la foto en el hueco del passe-partout. La sitúas en la parte posterior y la sujetas con cinta de carrocero para que puedas soltarla sin estropear nada:

Se supone que ya la tenemos montada y lista para llevar a la exposición. NO escribáis nada en la foto salvo que lo hagáis por detrás, ya que nosotros hacemos tarjetas personalizadas en todas las exposiciones y las colocaremos cuando la traigáis.
Ejemplo de tarjeta para las exposiciones:
